Alejandro Tarsia será uno de los capacitadores para vuelo de drones que vendrán de la mano de Juan José Jiménez, Trabajador Petrolero enrolado a la Institución que conduce José Llugdar, en el marco de una actividad que, de manera incipiente, cobra importancia dentro de la industria hidrocarburífera.
Jiménez impulsa esta iniciativa de la que tomará parte Tarsia junto a Rubén Martín, quienes brindarán un curso del 3 al 6 de abril en Comodoro Rivadavia, Chubut, teniendo como sede el predio ubicado en calle Hudson N° 54 del barrio 25 de mayo de esa ciudad chubutense, en el denominado Parque Tecnológico de Kilómetro 4.
El propio Tarsia estuvo hace tres meses en la región, en ocasión de la exposición tecnológica que organizó el propio ente municipal en su parque afín, donde notó la cantidad de personas que se acercó a su stand a aprender sobre el mundo de los drones. “Muchos piensan que es un juguete y nosotros entramos ahí como actores, donde les decimos que se puede aprender jugando, perfectamente, pero que el equipo no es un juguete en sí”, explicó.
Y agregó que con el primer y único centro en la Argentina certificado por ANAC: “somos como una escuela que a partir de este año certificamos y entregamos lo que se llama la matrícula llamada ‘miembro de tripulación remota’, la licencia para volar estos equipos de forma profesional o comercial”, y que en la actividad petrolera pueden resultar nuevos aliados, pues se han convertido en una forma barata y eficiente de realizar las tareas más complicadas y peligrosas, resultando una tecnología que ayuda a detectar problemas antes de que sea demasiado tarde, generando un importante ahorro de costes a las compañías y eliminando riesgos para los empleados.
“Hace más de un año y medio que la Administración Nacional de Aviación Civil reglamentó provisoriamente y después puso en vigencia el establecimiento de los criterios, limitaciones y alcances por los cuales un dron de características que ya no son las de un simple juguete, debe tener un operador responsable, donde se busca concientizar a todos quienes se meten en este mundo”, refirió Tarsia.
En ese marco, sostuvo que hay una edad mínima establecida para que los chicos los puedan volar, siempre acompañados de un mayor; y se dan todos los lineamientos para que la gente tenga conciencia de dónde y cuándo poder volar, y también que tenga los conocimientos básicos de su equipo en cuanto a mantenimiento, el cual comparte espacio aéreo con otros, principalmente con aviones.
Acerca del curso
El curso no requiere conocimiento previo, es para mayores de 18 años con secundario completo y se debe asistir al 100 % de las clases. La información para inscribirse se puede solicitar al celular 2974760824, de Juan José Jiménez; a Comodoro Conocimiento y en la propia página web www.dronesvip.com.ar. Las vacantes son limitadas a 20 (veinte) alumnos.
El 3 de abril, de 9 a 18 hs se dictará Teoría Drone-Aeronave y Arquitectura de Equipos, al día siguiente -siempre en el mismo horario- será la Práctica (Primeros Vuelos en Espacio Aéreo Autorizado, Modos de Vuelos, Cursos y Ejercicios de examen); el jueves 5 tendrá lugar la Teoría Drone, Aspectos Legales e Introducción a la Fotografía Aérea y en la jornada final la Práctica, Vuelos Ejercicios de pilotaje, Vuelos Autónomos controlados y Ejercicios de Examen.
Certificación
La autorización como miembro de tripulación remota, es otorgada al finalizar y aprobar este curso. Ante la ANAC (Administración Nacional de Aviación Civil), el alumno deberá realizar la inscripción del Drone de forma personal en ANAC (ya que el trámite se realiza mediante el CAD de cada alumno y la ANAC requiere certificación de firma del propietario de VANT), relacionado a la presentación de estudios psicofísicos, y para abonar los aranceles de ANAC tabulados para tal fin, se coordinara en cada cursada.